¿FUNCIONA REALMENTE EL TAROT?

Parece magia, pero la física moderna lo llama Entrelazamiento cuántico, o en palabras de Einstein, Acción fantasmal a distancia. El psicólogo Carl Jung, por su parte, le dio el nombre de Sincronicidad
La sincronicidad es la coincidencia de dos fenómenos semejantes o "gemelos" en el mismo tiempo y espacio sin causa aparente y que conllevan un pequeño despertar de conciencia en quien lo experimenta. Un ejemplo común es recibir la llamada de alguien en quien acabamos de pensar, a pesar de no haber tenido contacto con esa persona en mucho tiempo. Otro ejemplo frecuente es el de tararear al azar una canción que seguidamente empieza a sonar en la radio.

El tarot parece haber sido diseñado en base a este mecanismo sincrónico que muestra el estado real de la vida de quien lo consulta, así como sus sentimientos, aspiraciones, miedos, desafíos, fortalezas y posibilidades. 

El tarot es, ante todo, una herramienta que nos facilita la tarea más esencial de nuestra existencia: El autoconomiento. Sus 78 imágenes representan los diversos arquetipos universales de experiencia humana que todos atravesamos de forma cíclica. Por ejemplo, todos somos la reina de copas (cariñosos), la sota de bastos (entusiastas), el ermitaño (solitarios) o el loco (imprudentes), según la situción y nuestro modo de responder al entorno.


¿QUÉ ES EN REALIDAD EL TAROT?

El tarot es, ante todo, un espejo: refleja tanto nuestro interior como las circunstancias que estamos viviendo. A través de él emergen preguntas esenciales:

  • ¿Qué parte de mí necesita sanar?
  • ¿Cuál es el origen de mis miedos?
  • ¿Por qué repito los mismos patrones tóxicos?
  • ¿Qué puedo hacer —o dejar de hacer— para superar mis bloqueos?
  • ¿Qué enseñanza guarda esa experiencia que aún me duele?
Desde esta perspectiva, el tarot se revela como una herramienta terapéutica poderosa, cada vez más reconocida y utilizada en el ámbito psicológico a nivel mundial. Sus arquetipos e imágenes nos ayudan a ampliar la mirada, conocernos en mayor profundidad, tomar decisiones con claridad, descubrir nuevas posibilidades, gestionar bloqueos, potenciar la intuición y estimular la creatividad.

Si sientes la necesidad de comprender y trascender aspectos de tu vida que hoy resultan difíciles, el tarot puede ser una puerta hacia ese conocimiento profundo que nos guía a través de sus símbolos y arquetipos.